¿Cómo podemos ayudarle?
Índice
< Todos los temas

Poner un dominio en la lista negra se refiere al proceso de bloquear o prohibir el acceso a un dominio o sitio web específico. Esta acción se toma normalmente para evitar que los usuarios o sistemas accedan o interactúen con un dominio que se considera indeseable, malicioso o inapropiado. Las listas negras pueden implementarse a varios niveles, como en dispositivos individuales, redes locales o incluso a escala global por parte de proveedores de servicios de Internet (ISP) o registradores de nombres de dominio.

Hay varias razones por las que se puede optar por incluir un dominio en una lista negra. Un objetivo común es proteger a los usuarios de posibles amenazas a la seguridad. Los dominios maliciosos a menudo alojan estafas de phishing, malware u otras formas de ciberataques que pueden comprometer la privacidad y seguridad de individuos u organizaciones. Al incluir estos dominios en una lista negra, se puede proteger a los usuarios para que no accedan inadvertidamente a contenidos dañinos o sean víctimas de estafas en línea.

Otra razón para incluir un dominio en una lista negra es imponer el control de contenidos o impedir el acceso a material censurable o inapropiado. Esto es especialmente relevante en instituciones educativas, lugares de trabajo u hogares donde existe la necesidad de restringir el acceso a determinados sitios web que pueden contener contenido explícito, violencia, incitación al odio u otras formas de contenido que infrinjan las directrices éticas o legales.

Para incluir un dominio en una lista negra, se pueden emplear varios enfoques y técnicas, en función del nivel de control necesario y de los recursos disponibles. He aquí algunos métodos habituales:

1. Lista negra de dispositivos locales: En un dispositivo individual, como un ordenador o un smartphone, los usuarios pueden modificar el archivo hosts para bloquear dominios específicos. Al añadir entradas a este archivo, se ordena al dispositivo que redirija cualquier petición al dominio incluido en la lista negra a una dirección IP inexistente o bloqueada, impidiendo así el acceso.

2. Listas negras a nivel de red: Los administradores de red pueden implementar medidas de listas negras a nivel de router o firewall. Esto les permite bloquear dominios en toda una red, garantizando que todos los dispositivos conectados a esa red no puedan acceder a los dominios de la lista negra. Las listas negras a nivel de red suelen implicar la configuración de reglas de cortafuegos o la utilización de dispositivos de seguridad de red especializados.

3. DNS Blacklisting: Las listas negras del Sistema de Nombres de Dominio (DNS) implican el bloqueo de dominios mediante la manipulación del proceso de resolución DNS. Las listas negras DNS, también conocidas como DNS blocklists o DNS sinkholes, mantienen una base de datos de dominios conocidos como maliciosos o no deseados. Al configurar los servidores DNS para que hagan referencia a estas listas de bloqueo, las peticiones a los dominios de la lista negra se redirigen a una dirección IP alternativa o simplemente se deniega su resolución.

4. Listas negras de proveedores de servicios de Internet (ISP): Los ISP pueden implementar listas negras a mayor escala, impidiendo a sus abonados el acceso a determinados dominios. Este enfoque se utiliza a menudo para bloquear dominios asociados a actividades ilegales, como la piratería, la infracción de derechos de autor o la distribución de contenido explícito. Los ISP mantienen sus propias listas negras o pueden colaborar con otras organizaciones para aplicar restricciones a nivel de dominio.