Pero subyace una dura verdad: Los datos de correo electrónico B2B se deterioran más rápido que casi cualquier otro activo empresarial.
Muchos proveedores se enorgullecen de sus «datos de calidad», pero la realidad de la economía y el comportamiento humano implica que ningún conjunto de datos puede seguir siendo perfecto durante mucho tiempo. El reto para los proveedores de datos no es si los datos caducan, sino cómo gestionar ese deterioro de forma inteligente.
La decadencia oculta de las direcciones de correo electrónico B2B
Cada año, entre el 10 y el 20% de las direcciones de correo electrónico de las empresas no se pueden entregar. En algunos sectores, el porcentaje es aún mayor.
¿Por qué ocurre esto?
- Movilidad laboral: Los profesionales cambian de puesto, ascienden o abandonan la empresa.
- Rotación de empresas: Las empresas cierran, cambian de marca o se reestructuran.
- Despidos: Las reducciones de plantilla a gran escala borran instantáneamente miles de direcciones de correo electrónico.
En la práctica, esto significa que una base de datos que parecía limpia hace seis meses puede arrojar de repente una tasa de rebote preocupante. Y debido a la enorme escala -cientos de millones o incluso miles de millones de registros- mantener todo al día es mucho más difícil de lo que los compradores suponen.
Por qué no son posibles los datos «perfectos
Desde fuera, la solución parece obvia: basta con volver a verificar todo con regularidad. Pero en realidad, eso no es viable.
Para mantener una alta capacidad de entrega constante, la verificación del correo electrónico tendría que realizarse en conjuntos de datos completos cada dos o cuatro semanas. A escala empresarial, esto conlleva unos costes astronómicos. Incluso los procesos de verificación más eficientes dejan de ser rentables si se repiten con esa frecuencia.
Por eso, cada vez más proveedores están adoptando flujos de trabajo en los que la verificación a gran escala se complementa con una capa inteligente de comprobaciones a petición. Con Bouncer, esto resulta asequible y escalable: los proveedores pueden verificar lo que más importa, cuando importa, sin romper su modelo de negocio.
La frustración de los compradores
Desde el punto de vista del cliente, parece injusto: «Ya pago por estos datos, ¿por qué tengo que pagar otra vez para verificarlos?».
La frustración es comprensible. Pero una vez que se ve la magnitud del reto, tiene sentido por qué los proveedores no pueden simplemente absorber el coste. Incluso con precios al por mayor, verificar millones de registros de forma continua rompería la economía de la mayoría de las empresas de datos.
Por eso, cada vez más proveedores han empezado a adoptar un enfoque diferente: incorporar la verificación al flujo de trabajo, pero sin pretender que sea gratuita.
Estrategias más inteligentes para los proveedores de datos
En lugar de perseguir el sueño imposible de unos conjuntos de datos «siempre perfectos», los proveedores pueden adoptar enfoques más inteligentes y sostenibles.
1. Posición como prima
Una vía es adoptar la verificación como elemento diferenciador. Los proveedores pueden incluir la verificación en sus precios y promocionarse como «siempre limpios». Los clientes pagan más, pero saben que compran tranquilidad.
Esto requiere valor para replantear el valor: no se trata de » datos baratos a escala«, sino de «datos fiables que protegen su reputación». Con normativas cada vez más estrictas y proveedores de buzón de entrada cada vez más estrictos, ese posicionamiento puede ser poderoso.
2. Mantener subconjuntos de alto contacto
Otro enfoque consiste en concentrar los recursos donde más importan.
Piense en ello como si fuera la gestión de un inventario:
- Un fabricante de automóviles tiene en stock piezas de recambio comunes porque los clientes las necesitan a menudo. Las piezas raras sólo se fabrican por encargo.
- Un restaurante tiene siempre listos sus platos más populares, pero una especialidad poco frecuente puede llegar congelada y requerir una preparación extra.
Los datos funcionan de la misma manera. Los proveedores deben:
- Mantenga actualizados y verificados los subconjuntos solicitados con frecuencia (por ejemplo, sectores o funciones de gran demanda).
- Gestione subconjuntos raros o de nicho bajo demanda cuando un cliente lo solicite.
De este modo, los clientes siguen obteniendo la calidad que necesitan, sin que el proveedor tenga que incurrir en costes interminables para mantener datos de baja demanda.
3. Sea transparente sobre la frescura
El peor resultado es una sorpresa. Los clientes pueden vivir con datos ligeramente antiguos si saben lo que obtienen. Lo que les frustra es pagar por una «precisión garantizada» y recibir altas tasas de rebote.
Los proveedores que indican claramente qué registros han sido verificados recientemente, cuáles son más antiguos y cuáles pueden verificarse previa solicitud generan confianza. La transparencia convierte un punto débil en una característica del servicio.
Por qué la responsabilidad compartida es el futuro
En última instancia, la frescura de los datos no es un problema que pueda resolver una sola parte.
- Los proveedores no pueden permitirse volver a verificar toda su base de datos cada mes.
- Los clientes no pueden permitirse enviar campañas que reboten y dañen su reputación de remitentes.
El modelo más sostenible es la responsabilidad compartida:
- Los proveedores mantienen segmentos de gran demanda con una calidad sólida.
- Los clientes verifican los subconjuntos cuando necesitan una capacidad de entrega garantizada.
En lugar de señalar con el dedo, ambas partes comparten la tarea de mantener los datos utilizables.
La economía detrás del problema
Merece la pena detenerse a pensar por qué existe este problema. A diferencia del correo electrónico de los consumidores, que puede permanecer estable durante años, el de las empresas está vinculado al empleo. Y el empleo es dinámico. En una economía global en la que la permanencia en el empleo se reduce, las empresas emergentes surgen y desaparecen de la noche a la mañana y los despidos se suceden, las direcciones de correo electrónico B2B son intrínsecamente inestables.
A esto hay que añadir el enorme tamaño de las empresas de datos actuales. Cuando se gestionan cientos de millones de contactos, incluso una tasa de deterioro modesta se traduce en decenas de millones de direcciones no válidas cada año.
Por eso, los proveedores que prometen «datos siempre frescos» sin procesos claros de verificación están exagerando. La economía simplemente no funciona.
Reflexión final
La decadencia de los datos B2B no es un defecto, es un hecho. Los proveedores que prosperen serán los que se adapten.
- Posicionamiento premium: ofrecer datos siempre verificados a un precio más elevado.
- Enfoque en subconjuntos: mantener prístinos los conjuntos de datos básicos y gestionar los casos extremos bajo demanda.
- Transparencia: establecer expectativas realistas con los clientes.
En Bouncer, ayudamos a los proveedores de datos a convertir esta realidad en un punto fuerte: ofrecer el nivel adecuado de calidad al coste adecuado, con una verificación escalable que mantenga el equilibrio entre la economía y la confianza del cliente. Póngase en contacto con nosotros hoy mismo para obtener más información.